Situación vergonzosa

Ante las manifestaciones llevadas a cabo por la Plataforma de Afectados por la Hipoteca (PAH), por su actividad de denuncia dirigida a los políticos cuyo partido ha traído esta situación, la Secretaría de Estado de Seguridad ha hecho llegar a la Policía Nacional una instrucción en la que se ordena identificar y detener a quienes participen en actos de hostigamiento a políticos. (¿Quieres saber más? Pincha en Actualidad: Colau lamenta que envíen a la Policía contra los desahuciados y no contra los corruptos)

Al parecer este hostigamiento afecta a la libertad de los familiares de los pepistas, los mismos pepistas que han obligado a familias enteras a salir de sus casas. Además al pepista del País Vasco, Antonio Basagoiti, le recuerda al entorno de eta. Podría haber sido un poco más original a  la hora de buscar excusas para detener a este movimiento, pero ya ni eso saben hacer.

Veamos, o jugamos todos, o rompemos la baraja. Supongamos que mi familia tiene que abandonar su casa porque me he quedado sin trabajo a causa de la crisis económicas agravada por la actitud del gobierno y su reforma laboral. Ellos, los gobernantes y políticos, no ven mermada su libertad, no sufren las consecuencias de su mala gestión de la situación actual. Sin embargo, los familiares de estos políticos, esos que viven a todo confort sin que nada les falte, les molesta la reacción de la gente ante la actividad del susodicho miembro de su familia, que es quien los ha conducido a esta situación. Si mi familia ha de sufrir las consecuencias de esta situación, la suya debería saber asumir las consecuencias de los actos de su familiar. Puestos a eso, los daños colaterales se han de aguantar por ambas partes. 

Pero está claro, a los que viven bien, no les importa el resto de la gente, vale, pero si eres pariente de un político de estos, tendrías que saber que la moneda siempre tiene dos caras, apuntarse solo a lo bueno de la situación es demasiado hipócrita. ¿Quieres apuntarte a lo positivo? pues aprende también a convivir con lo negativo, que no es oro todo lo que reluce.

Situación vergonzosa.

Además, ¿cuántos días les ha llevado a los pepistas tomar esta decisión? Más les valdría darse la misma prisa cuando se refiere al desempeño de su cometido dentro del gobierno de este país. Esto último es lo que más me crispa y no puedo evitar sentir que estoy viviendo como hace varias decenas de años, allá pos los 60, por ejemplo. Tal vez... ¿esta democracia no tiene ya demasiadas connotaciones dictatoriales?

Hace mal olor por todos los lados, ¿Hasta cuándo... lo vamos a consentir?

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